El català tranquil

La lengua catalana ha evolucionado de manera saludable durante 900 años sin el Institut d'Estudis Catalans ni ninguna academia, pero en cambio hoy la actitud de los lingüistas respecto al catalán a menudo es de un proteccionismo excesivamente rígido. Enric Gomà cree que hay que dejar que la lengua se desarrolle y cree. Por ello propone (con argumentos) la aceptación de palabras y expresiones vivas y expresivas como 'enganxina', 'guixeta', 'cumbaià', 'xiruca', 'xarrup' (por sorbete),' peta' (por porro)... formas populares como 'àrbit', o expresiones como 'al·lucinar mandonguilles', 'bon vespre' o 'estar com un tren', que generan reticencias porque no tienen tradición. El catalán tranquilo es un panfleto optimista que pretende que los amantes de la lengua no creen más ansiedad a los hablantes. Una lengua que crea inseguridad deja de hablarse.