Magia de sangre

Desde que Cain, de 19 años, completó su entrenamiento como Cazadora de sangre, su trabajo ha sido proteger a la gente de Edimburgo de los vampiros y otras criaturas oscuras. Cain se toma su trabajo en serio, trabaja meticulosamente y sigue las reglas impuestas. Cain y Warden casi no pueden imaginar que, hace tan solo unos años, eran compañeros de lucha y que confiaban a ojos ciegos el uno en el otro. Actualmente, las diferencias entre ambos Cazadores son tan grandes como pesado el dolor tras haberse herido el uno al otro. Ahora, Cain y Warden se ven repentinamente obligados a trabajar juntos, un hecho que a Cain no le entusiasma mucho al principio. Sin embargo, cuanto más tiempo pasa con Warden, mejor llega a comprenderlo. Y mientras luchen juntos por la vida o la muerte, deberán resolver si para ellos también hay una segunda oportunidad.