La energía de los alimentos

Utilizamos la riqueza de los alimentos como medio para crear energía y armonía, es la herramienta básica para ello y es el principio que rige las recetas de este libro. Hace años todos los vegetales, las carnes y los pescados, todos los alimentos en general, eran sanos. El consumo de alimentos provenientes de superexplotaciones causa enfermedades graves entre las generaciones actuales. A ello también se suma el hecho de llevar una vida con mucho estrés. Debemos tener muy presente que somos vida y hemos de vivirla en plenitud, cuidar las emociones, liberar nuestra mente, aceptar o decidir con respecto a nuestras relaciones y, en esencia, ser libres. También es importante saber que si se padece un problema degenerativo importante, pese a él, podemos tener una gran calidad de vida. Por todo ello, es fundamental comer sano para alcanzar un equilibro, el cual no se consigue en unos días, sino que es un trabajo que debemos desarrollar con paciencia y constancia. Mente, emociones y actividad física, combinados entre sí y trabajados día a día, minuto a minuto, os aportarán resultados maravillosos. Compensa vivir con paz, con alegría, sorteando los obstáculos y sin preocuparnos del mañana. Ante el agravio, sonríe, ante las dificultades, trabájalas y continúa. Y siempre con lo más importante, el amor.