Confitura de vidre

"Los instantes de belleza sublime, los amaneceres, las puestas, los grumos de nubes amontonados en torres interminables, los cielos de poniente rojizos con hilachas de nubes de un tono rosado desvanecido. El contacto con el agua del mar en un chapuzón, los pies en remojo en un rincón de un río en el Pirineo. Los copos de la nevada repentina, la lluvia avara que esperamos con deleite. He aquí un pequeño repertorio". Quim Nadal es un observador de los paisajes y de las realidades. En estas páginas íntimas y conmovedoras nos hace partícipes de sus recuerdos nacidos de los cinco sentidos. Remembranzas de su adolescencia en Francia, momentos deliciosos en el ámbito familiar, paisajes evocadores, sensaciones que le han quedado clavadas en la piel y en el alma. Una descripción breve y exquisita de los pequeños placeres de su vida.