Universidad Pontificia de Salamanca, 2024
316 p. 24x17 cm.
9788417601829
Consultar disponibilidad en
En el año 1723, un joven, Luis Salvador Carmona llega a Madrid con 14 años para formarse como escultor en el taller de uno de los más prestigiosos escultores de la época, don Juan de Brillabrille y Ron. Su talento no tardó en desvelarse y, con tan solo 15 años, su maestro ya le consideró el más importante de sus alumnos.
Continuó demostrando su valía en el ambiente de la Corte en el que se forjó una personalidad distintiva como escultor, trabajando para las obras del Palacio Real. Contó asimismo, con uno de los obradores más importantes de Madrid donde realizaba y exponía sus obras de imaginería.
Él mismo llegó a alcanzar una posición relevante en la Fundación y Academia de Bellas Artes De San Fernando, en la que fue nombrado Teniente Director de Escultura el 12 de abril de 1752.
Su legado nos ha dejado excelentes obras de imaginería en distintas ciudades de España. En Salamanca encontraremos algunas de las que pueden ser consideradas de las mejores que se realizaron en el siglo XVIII, como la imagen del Cristo Flagelado que acoge la Iglesia de la Clerecía o la imagen de la Virgen de los Dolores o Piedad de la Catedral, ambas pertenecientes a sus últimos años como imaginero.
Esta obra que, además de plantearse una perspectiva inicial de la vida y la trayectoria de Luis Salvador Carmona como escultor, se ha ocupado, tras una profunda y exhaustiva investigación, de documentar y puntualizar datos procedentes de interpretación dudosa sobre su obra en Salamanca.
La obra proporciona aportaciones y datos novedosos, documentados, sobre su obra en Salamanca. Como tales pueden servir como ejemplo la aclaración de las siguientes: la datación del año en que fue esculpida la Virgen de los Dolores o Piedad de la Catedral, o quién realizó el encargo de la Virgen de los Dolores de las Madres Agustinas Recoletas, o el año en que realizó el Altorrelieve en mármoles para el colegio Mayor de Oviedo. No menos meritorio es el estudio relacionado con la búsqueda de la potencial autoría de Luis Salvador Carmona de la imagen de San José de Cantaracillo, donde se rastrea su posible relación con el Duque de Frías, Conde de Peñaranda de Bracamonte y Señor De la Villa de Cantaracillo, que encargó a Luis Salvador Carmona una imagen de San José para la iglesia por él mandada a construir en Madrid.
La obra, en resumen, aporta una inédita y profunda documentación sobre la obra de Luis Salvador Carmona en Salamanca que podrá servir para futuros estudios e investigaciones que se intenten abordar sobre el autor.
Tweet