Ante la vulneración de derechos humanos, incluso siendo generalizada y habitual, puede suceder que la sociedad no sea capaz de alertar de la gravedad del caso, normalizándola y perpetuándola. Sin embargo, en ciertas ocasiones, hay quienes superan esa inercia, consiguiendo vencer la sensación de no poder hacer nada, y denuncian la injusticia. Despiertan auténtica admiración, sobre todo si son las personas que han sufrido la violación de sus derechos quienes no se conforman con el papel de víctimas y luchan por la dignidad y el respeto. Así son las personas que protagonizan las historias que se recogen en este libro sobre el derecho a la identidad, el derecho a la reparación y la dignidad de las víctimas y el derecho a una muerte digna. |