Este es un libro sobre salud mental que nos interpela a todos, en especial, a cualquier persona que tenga interés o que esté en contacto con personas con discapacidad intelectual, ya sean familiares, educadores, maestros, profesionales de la salud mental, etc. Nace de la inquietud por recoger la experiencia de casi veinte años trabajando en el campo de la salud mental con personas con discapacidad intelectual. Hemos querido partir de nuestra práctica clínica y relatar una serie de casos que nos ayuden a reflexionar sobre las vicisitudes que hay detrás del funcionamiento y el comportamiento de personas con discapacidad intelectual, a fin de entender y atender diferentes formas de expresión del sufrimiento emocional, entre ellas, los trastornos de conducta; a visualizar y dar voz a sus singularidades, que, por desgracia, a menudo quedan ocultas tras el estigma; y a señalar que existen necesidades educativas y sociales que, si no quedan cubiertas, contribuyen a la aparición de problemas de salud mental, cosa que psiquiatriza aspectos que pertenecen al ámbito social o educativo. Muchas veces se interpreta que la discapacidad intelectual explica o justifica determinados comportamientos, cuando no siempre es así. Es crucial tratar de diferenciar lo que tiene que ver con la discapacidad y el límite de lo que corresponde a la esfera de la salud mental o emocional. De ahí que resaltemos la importancia de entender la conducta como una expresión, un acto de comunicación, en ocasiones un grito desesperado, que, si lo podemos escuchar, en lugar de meramente aplacar, puede facilitar el desarrollo de otras formas de intervención. Subrayamos, asimismo, la necesidad de trabajar y acompañar a las familias y a todos aquellos que cuidan a estas personas, con vistas a la mejora de su calidad de vida y a la promoción y prevención en lo relativo a su salud mental. El libro parte de la discapacidad concreta de las personas protagonistas de nuestros relatos, pero nos irá llevando, poco a poco, a observar cómo convivimos y lidiamos con las propias incapacidades, limitaciones y resistencias, como individuos y como sociedad, y cómo estas también condicionan una cierta forma de ver y de relacionarse con la discapacidad. |