En 1566, Miguel de Cervantes se trasladó a Madrid por primera vez siguiendo los pasos de la Corte. Tantos siglos después, aún es posible seguir el rastro del autor del Quijote por las calles de la villa. Este libro propone (mapa en ristre) un paseo desde la actual plaza de Oriente hasta la de las Cortes, un camino de no más de dos horas —con andar relajado— para rememorar aquella ciudad que conoció Cervantes. Durante ese recorrido podremos imaginar mercados, mentideros, conventos, iglesias, teatros y tiendas para acercarnos a los espacios donde habitó y compuso gran parte de su obra. Y, aunque en realidad apenas se conservan de él unas cuantas placas conmemorativas, al final del itinerario podrán sentirlo tan vivo como cuando escribió el Quijote. |