Es un verdadero goce que a 50 años justos del establecimiento de las Umap (Unidades Militares de Ayuda a la Producción) en Cuba, oprobio que duraría desde 1965 a 1968, la Editorial Verbum haya decidido reeditar esta novela cuyo propósito, entre otros, ha sido el de sumar otro granito de arena a aquella tragedia de la que fueron objeto jóvenes y no tan jóvenes, todos inocentes, que sufrieron cautiverio bien por sus filiación religiosa, su orientación sexual o, en fin, por cualquier otra conducta que no se aviniera con el hombre nuevo que la dictadura se proponía construir |