Una voz masculina nos cuenta su historia. Está amaneciendo y se encuentra acostado, sin poder levantarse, en un lugar que no reconoce. En medio de su confusión, relata lo que cree que es su vida, en la que la única ancla son sus amigos Elisa y Tim. Entre dudas y vacilaciones la trama se construye y se deconstruye una y otra vez hasta llegar a un nal inesperado. Loriga vuelve a deslumbrarnos con su prosa aforística y con el humor, la ternura y la vulnerabilidad de un personaje que debe combatir con el mundo que le rodea. TIM explora la memoria, la conciencia, la frontera que separa la realidad de la imaginación y los límites de lo humano. Y nos hace reflexionar sobre nuestra identidad en un momento de redefinición a la luz de los avances de la tecnología |