Películas nacidas en los márgenes, en paralelo a la "alta cultura" cinematográfica, títulos incomprendidos en su momento y reivindicados a posteriori por una minoría entusiasta, aciertos extraños poco conocidos, filmes apasionantes por atípicos o difíciles de descifrar, obras irresistiblemente perfectas... todas estas propuestas merecerían, sin duda, ser consideradas películas de culto. Todas éstas y muchas más, pues al final, la concesión de esa etiqueta responde a un estímulo básicamente emocional: reivindicamos o rendimos culto a las películas que nos conmueven, provocan o perturban de la manera más extraña y menos convencional. Los autores de este libro contribuyen , con enfoque personal y desde distintos ángulos, a la definición de la escurridiza etiqueta "de culto". A la vez, repasan su evolución y argumentan cómo han cambiado los mecanismos para generar películas de culto y para acceder a ellas. |