Laboratorio de esquemas sonoros que, desde el aforema o música que piensa, cuestiona (pone en crisis, replantea) el ejercicio de –como no alcanzó a decir Gonzalo Rojas– razonar o masticar la oreja. Ello hacia una poesía del accidente o la circunstancia; lucha por buscar una música nueva, extraña: trastorno límite de la oralidad. Pensar con el oído de la circunstancia. Los materiales intervenidos o que intervienen pasan por Trilce, escenas de Proust, Altazor, Lorca, Parra, Octavio Paz, Mallarmé, bloopers de la música, Vila-Matas... Se trata de tensar el arco hasta salir del pentagrama. |