Sevilla, 1911. Trinidad regresa a la ciudad después de casi una década alejada de sus calles y su arte. Sobre sus recuerdos se cierne la sombra de un desamor, pero también de una traición que la alejó de Triana. Tras recibir una carta de la dueña de la fábrica de La Cartuja, la joven inglesa ha decidido volver a ese lugar donde descubrió los secretos que envolvían a su familia, y está dispuesta a enfrentarse a un nuevo reto: el diseño de la majestuosa plaza España de Sevilla junto al reputado arquitecto Aníbal González.
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