El actual modelo agroalimentario imperante —global, intensivo e industrial— no es sostenible y difícilmente podrá perdurar en el tiempo sin agotar los recursos naturales o dañar gravemente el medio ambiente, además de generar iniquidades. Es necesario un cambio en la producción, transformación, distribución y consumo de alimentos. Existen ya múltiples propuestas y alternativas para paliar las externalidades negativas generadas por el modelo mentado —los sistemas alimentarios locales, la agroecología, el cambio de hábitos alimenticios, el comercio justo, la incorporación de tecnologías agroalimentarias y la innovación, medias correctoras de las desigualdades entre los actores de la cadena, etc.— en la configuración de las cuales el Derecho está llamado a jugar un papel trascendental como instrumento de ordenación y ponderación de intereses. En los quince trabajos que integran esta obra, destacados expertos en Derecho, desde sus respectivas áreas de especialización, abordan los retos y las oportunidades que presenta la transición hacia sistemas agroalimentarios más sostenibles. El libro pretende ser una invitación a la reflexión. A través de este esfuerzo colectivo esperamos contribuir a un debate esencial para el futuro de nuestras sociedades y de nuestro planeta: la construcción de sistemas agroalimentarios sostenibles capaces de alimentar a la población mundial ahora y en el futuro, sin poner en jaque el mundo que habitamos. |