«Dos Españas, señores, están trabadas en una lucha incesante», dijo en cierta ocasión Ortega, resumiendo con su proverbial aplomo una historia de siglos. Dos Españas que son, más que el resultado de un análisis, el gran relato de un pasado con el propósito de abrir un futuro: «una España muerta, hueca y carcomida y una España nueva, afanosa, aspirante, que tiende hacia la vida». De esa creación cultural y de los sujetos que la inventaron y la echaron a rodar trata este magistral libro de Santos Juliá, cuya primera edición, publicada en 2005, fue distinguida con el Premio Nacional de Historia de España. Un recorrido que abarca desde los primeros escritores públicos, testigos de la revolución liberal de principios del siglo xix, hasta los intelectuales comprometidos de los años cincuenta y sesenta del siglo xx, protagonistas de la política de reconciliación y de los combates por la libertad y la amnistía. Entre medias, la generación del 98, que dio a España por muerta; los catalanes, que despertaron a su nación para incrustarla en una Espanya gran; las gentes del 14, que hablaron de una España viva; los jóvenes de la República, que acabaron llorando su pérdida; los católicos, que salieron a su reconquista; los fascistas, que la soñaron, unida e imperial, a orillas del Arlanzón, y los jóvenes intelectuales de mediados del siglo xx, protagonistas de la recusación del relato de esa dualidad. En conjunto, una historia coral de las sucesivas, enfrentadas y, finalmente, recusadas historias de las dos Españas. |