En noviembre Rita siempre se maldice a sí misma: un año más, y ya van unos cuantos, ha sido incapaz de decir que no a la cena de Navidad. Otra vez tendrá que organizarla. Mientras la mayoría de la gente se marca propósitos de año nuevo ambiciosos, con objetivos que cambiarán sus vidas para siempre, Rita tiene que conformarse con decir que no a la siguiente cena de Navidad. Pero cada año fracasa, y lo que empezó hace tiempo siendo una excepción se ha convertido en una costumbre, y la costumbre en una tradición inamovible. Cada Navidad la familia de Rita se encuentra en la casa del valle, el último refugio familiar, donde se reúnen todos: el cuñado, la hermana, los niños y Palmira, que durante muchos años trabajó con la familia y que ahora es, un poco, la voz de los padres muertos, de la voluntad olvidada. |