“Aparece Florentina”, así empieza esta novela de Eduardo Muslip que se concentra en el recuerdo vívido de una abuela. Florentina aparece en un cuarto, pero está en una sala de estar. Su sola presencia le impone al narrador esta novela. Retrato e hilvanado relato, Florentina es una muestra de la destreza con la que Muslip se entrena en el ejercicio de la narrativa: la abuela, el recuerdo de Galicia, el anticlericalismo, la alimentación, el mundo de las primeras lecturas, diez años en la vida del narrador y diez años en la vida de Florentina, la vejez, el amoroso diálogo con los muertos, le dictan al autor una novela conmovedora y extraordinaria. |