Pianista y compositora navarra nacida en 1888, Emiliana de Zubeldia fue una mujer notable. Estudió en Pamplona y París y a partir de 1928 recorrió varios países americanos, en los que trató a muchos músicos, compuso un buen número de obras y ofreció recitales pianísticos. A finales de los años treinta se estableció en México, y más en concreto, a partir de 1947, en Hermosillo, la capital del norteño estado de Sonora, donde desarrolló hasta su muerte, casi a los cien años, una ingente labor en todos los terrenos de la actividad musical, y donde se convirtió en una personalidad muy reconocida y admirada. La vida y obra de esta navarra desfilan ahora por este libro, que cumple la función de reintegrarla a su tierra y a su gente, a las que amó profundamente en el tiempo y en la ausencia.La autora, Leticia Varela, reconstruye una trayectoria larga y muy rica, presidida ante todo por el infinito amor que Emiliana de Zubeldia mostró siempre por la música y las bondades que este arte encierra. |