“Tener duende” para un cantautor como Andrés Martínez, es tener la capacidad de componer dejando que la armonía y la voz fluyan mientras en su interior se derrumba una mina de palabras y notas de las que salvaguardar las adecuadas, buscando el equilibrio melódico con el que una canción se construye, siempre en un determinado espacio de tiempo. Andrés tiene este don y de nada serviría este arte de no poder compartirlo con otras personas que empatizan con esa sensibilidad especial, es ahí es donde entra en juego su público y ahora sus lectores. |