El protagonista de esta novela, ya publicada en Chile, cuenta entre sus antepasados con un prócer de la patria, ministro de Hacienda, y con un nutrido grupo de militares al servicio de la joven República. Su pasión por la música se complementa con una entusiasta dedicación a la pintura, para cuya práctica se siente eximido de toda formación, desdeñando las enseñanzas que maestros antiguos o autores contemporáneos pudieran aportarle. Para desarrollar su afición cuenta con los fines de semana, en los que desembocan sus jornadas diarias como dependiente de una ferretería, y con la imagen tutelar de las Hermanas Mira, tías carnales y afamadas pintoras de un cándido estilo surrealista. |