La princesa Juana de Austria, hija del Emperador Carlos V, ha sido considerada a lo largo del tiempo como una de las personalidades femeninas más importantes, espiritual, artística y políticamente, en la España y en la Europa del siglo XVI, de tal manera que los distintos autores que se han acercado a estudiarla, con mayor o menor fortuna, la consideran como una princesa de una gran cultura, dueña de un patrimonio artístico y de una más que importante biblioteca, e incluso conocerá de las lenguas clásicas como el latín y el grifo, comprometida con su dinastía y con la religión. |