La presente antología bilingüe de los Carmina Burana -regida por un criterio de selección que atiende a escoger, junto a las indiscutibles piezas centrales, aquellas que más registran el tono jubilosamente erótico y exultante que tanto abunda en este cancionero- cumple la muy necesaria misión de hacer accesible a la generalidad del público una amplia muestra de la poesía de los goliardos, a la que la excelente 'Invitación a la lectura de los Carmina Burana' que abre el volumen califica certeramente de 'docta y desgarrada, risueña y cruel, retórica y no ajena a la tradición popular, delicada y violenta'. Basándose con toda solvencia en textos seguros, la traducción restituye el tenor literal de los poemas con vigilante precisión, en unas versiones que, encaradas a los originales latinos, reducen al mínimo la dificultad de acceso del lector culto a ellos, y aun en su estricta fidelidad no desconocen ciertamente el vigor y la elegancia expresiva. Así, de su lejanía de mito, la fabulosa y fabulada cofradía de los goliardos, esculpida en la piedra viva del poema como en una cueva de cristal de roca, nos depara el acento satírico, pesimista, hedonista o sarcástico de una época, unas gentes y un talante que se manifestarán en admirables piezas poéticas cuya fortuna es con frecuencia única en la lírica profana medieval: espejo cambiante, agitado y contradictorio de la condición humana, servido por un arte singular |