Ese éste, el tercer y último volumen de Artigas Ñemoñaré. El fin de la saga. Es nuestro año XIII, entre aquel ejemplar que abrió la secuencia y éste que la cierra. Planificamos una década entre ambos, pero el maravilloso rumbo que tomó esta aventura adquiriendo vida propia, quiso que llegáramos a los albores mismos de orto años trece tan caro al artiguismo, el del Bicentenario de sus culminantes “Instrucciones”. Si la serie se inauguró invitando a entrar en la Historia a las mujeres de Artigas, y varios de sus hijos ignorados hasta el momento, como parte de interiorizarnos de una vida privada a la que casi estaba prohibido ingresar, agregando a la vez una rama del árbol genealógico paraguayo, cortada o abandonada a su orgullosa suerte. |