Antroponimia y sociedad.

El uso de un nombre personal, que identifica y normalmente singulariza al individuo que lo lleva, es uno de los rasgos culturales más universales.
Con diferencias a veces notables respecto a qué sea gramatical o semánticamente ese nombre, con o sin significado, con propósito simbólico o sin él, asignado aleatoriamente o según pautas más o menos codificadas, elegido por unos u otros individuos, impuesto con o sin algún tipo de ritual, etc., no hay prácticamente excepciones al hecho de que cualquier grupo humano o sociedad usa el nombre propio para identificar a sus miembros.
Es probable que esas variaciones sean menos acentuadas de lo que los observadores de cada momento creen advertir, pero las variaciones se producen, es decir las preferencias o las razones por las que se eligen los nombres no son estables.
Este libro analiza, desde la doble perspectiva de la historia cultural y la sociología de la moda, las variaciones que se dan en contextos concreto e indaga en los cambios sociales que estas evidentes diferencias generacionales en el repertorio de nombres más comunes pueden reflejar